(Ciudad de Panamá-ANPanamá) Panamá mejoró en el índice de países que hacen negocios tanto a nivel mundial como en la región centroamericana, mientras que nuestros vecinos Costa Rica sufrieron un severo deterioro, convirtiéndolo en el país más complejo de la región para los negocios.
Las leyes en constante cambio y la necesidad de lidiar con múltiples niveles de agencias gubernamentales (burocracia) son algunos de los desafíos que enfrentan las empresas cuando intentan hacer negocios en América Latina.
En este sentido, Costa Rica se ubica como el noveno país económico más complejo y es uno de los seis países de América Latina que se encuentran entre los diez más complejos. El análisis proviene del Índice de Complejidad Corporativa Global 2021, un informe anual de TMF Group, un proveedor líder de servicios de apoyo a la gestión que ayuda a los clientes a invertir y operar de forma segura en todo el mundo.
Según el estudio, Panamá subió del puesto 15 al 25 en 2020, una mejora de diez lugares, ya que el índice clasifica las posiciones de complejidad en los negocios de menor a mayor.
Hay seis países latinoamericanos entre los 10 países más complejos. Brasil ocupa el primer lugar, seguido de México, Colombia, Argentina, Bolivia y Costa Rica, que aparecen en el 3º, 4º, 7º, 8º y 9º respectivamente y describen a la región como la región económica más compleja del mundo.
Según el GBCI, la complejidad de esta jurisdicción se debe principalmente a la necesidad de que las empresas demuestren un alto nivel de transparencia. En Costa Rica se llevó a cabo una reforma tributaria integral, que tiene como objetivo aumentar la transparencia en la lucha contra la evasión fiscal. También es el primer país centroamericano en unirse a la OCDE. Estos esfuerzos inevitablemente introducen requisitos adicionales que agregan complejidad para las empresas extranjeras que deseen operar en Costa Rica.
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