Cuando estalló el escándalo de evasión fiscal de los Papeles de Panamá en 2016, el nombre del fundador y director histórico de Editions Glénat, especializada en cómics, apareció en la lista de estafadores. Interrogado después por France Bleu Isère, Jacques Glénat dijo perplejo y no tenía nada que ver con esta historia de evasión fiscal. «Soy un contribuyente regular. ¿Dónde debo encontrar 4 millones de euros?‘ llamó por teléfono.
Primero negar, luego reconocer
Desde entonces, cambió de opinión y admitió su culpabilidad en estos hechos de «lavado de evasión fiscal grave».
Condenado este martes en París, durante una audiencia oral sobre una previa admisión de culpabilidad, aceptó el veredicto propuesto por la Fiscalía Nacional del Tesoro, a saber: 18 meses de prisión en libertad vigilada, 200.000 euros multa y 470.000 euros decomiso. El veredicto fue confirmado por el tribunal.
El poder judicial ha demostrado que desde 1997 Jacques Glénat había puesto en marcha un elaborado arreglo sobre empresas con sede en paraísos fiscales que le permitía hacerlo, explica el poder judicial. «para reclamar dividendos sustanciales sin ser identificado por las autoridades fiscales». Una estafa que le había permitido ocultar a Hacienda casi 10 millones de euros y cobrar de forma ilegal 4 millones de euros en dividendos.
Un arreglo sofisticado en paraísos fiscales
con esa cantidad había comprado obras de arte por 3,5 millones de euros, Cuadros de Corot, Brueghel o Fantin-Latour o muebles Hache, llamado así por el famoso carpintero de Grenoble, que regaló a sus hijos en 2014.
Sin embargo, en defensa de Jacques Glénat y sus tres hijos, incluida su hija, que desde entonces asumió la dirección de la empresa, el fiscal nacional financiero subrayó quehabían arreglado su situación con las autoridades fiscalesa través de ajustes y sanciones.
El que algunos en el mundo de los cómics habían apodado Scrooge había publicado una serie en 2010 con un título de advertencia. Se llamó «Secreto bancario», un thriller sobre lavado de dinero, malversación de fondos y evasión de impuestos. Cuando la ficción se encuentra con la realidad.
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