El gerente del Puerto de Balboa, en la entrada sur del Canal de Panamá, y trabajadores en huelga desde mediados de julio acordaron este lunes poner fin a esta maniobra, que ha causado importantes bajas al Gobierno.

Las partes «han llegado a acuerdos para poner fin a la huelga» en el Puerto de Balboa, administrado por Hutchison Ports PPC, subsidiaria de la empresa de Hong Kong CK Hutchison Holdings Limited (CK Hutchison), dijo el Departamento del Trabajo en un comunicado. Durante 12 días, los mediadores de este ministerio “condujeron a las partes hacia los objetivos comunes que garantizarán la paz social en el centro logístico nacional”, dice la nota de prensa.

Los trabajadores, en demanda de mejores salarios y la negociación de un convenio colectivo, paralizaron desde el 17 de julio gran parte de la actividad del puerto, que mueve el 5% del comercio marítimo mundial. Hutchison Ports PPC también dijo en un comunicado que se había llegado a un acuerdo «para poner fin al cierre ilegal» de las actividades portuarias, y señaló que «los trabajadores deben reanudar de inmediato sus funciones diarias».

Las empresas de los sectores marítimo, portuario y logístico temían importantes pérdidas económicas y la pérdida de clientes hacia otros países de la región. Con una capacidad anual de 4 millones de contenedores, el puerto de Balboa es la terminal de transbordo más importante de América Latina.

Según Hutchison Ports, al menos cuatro barcos que conectan Asia, América Latina y Europa han cambiado sus operaciones a otros puertos de la región. Otros seis tuvieron que detener sus operaciones. Estos desplazamientos significan una pérdida de 15.000 contenedores para Panamá, estima Hutchison Ports. “En tal situación, Panamá pierde competitividad y reputación”, lamentó Edgar Pineda, representante de Hutchison Ports, quien temía pérdidas económicas “devastadoras” si continúa la huelga.