Un ex residente de North Haven y veterano de la Segunda Guerra Mundial celebró su cumpleaños número 103 con familiares, amigos y simpatizantes en su casa en Woodbridge.
Howard Rohloff, quien vivió en North Haven durante más de 60 años, cumplió 103 años el 20 de marzo. Ahora reside en un complejo de viviendas para personas mayores llamado Coachman Square.
Después de graduarse de la universidad con un título en ingeniería eléctrica, Rohloff sirvió a su país tanto en el Ejército como en la Fuerza Aérea durante la Segunda Guerra Mundial. Después de regresar de la guerra, sirvió a la comunidad de North Haven como comisionado de policía y como líder de los Boy Scouts.
Rohloff y su esposa criaron a sus dos hijos, Robert y Brent, en North Haven.
El hijo de Rohloff, Robert, dijo que su padre nació en New Haven, se mudó a Hamden y asistió a la Universidad de Connecticut.
A partir de ahí se unió al ejército.
La carrera militar de Rohloff lo llevó por todo el mundo. Su tarea principal era llevar tecnología a las bases militares.
Sin embargo, en algún momento durante la guerra, a Rohloff se le encargó la entrega de raciones entre la Ciudad de Panamá y las Islas Galápagos. Durante meses durmió en un remolcador a 13 millas al sur del ecuador.
La directora ejecutiva de Coachman Square, Sarah Malaspina, señaló que Rohloff todavía tiene ese espíritu aventurero.
«Howard es un residente brillante y feliz», dijo. «Incluso a los 103, está listo para cualquier cosa y, a menudo, se une a nosotros en excursiones fuera del sitio».
Aunque cumplir 103 años es todo un logro, Malaspina dijo: «Cada día con Howard es una celebración».
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